La Corte Suprema de Estados Unidos aceptó el martes revisar una orden ejecutiva del presidente Barack Obama para permitir que hasta cinco millones de inmigrantes "salgan de las sombras" y trabajen legalmente en el país.
Los magistrados dijeron que sopesarán desechar sentencias de tribunales inferiores que bloquearon las acciones ejecutivas de Obama en momentos en que se aviva una campaña por las candidaturas presidenciales ya cargada por el tema.
El caso probablemente sea analizado en abril y se anuncie una decisión a finales de junio, un mes antes de las convenciones de nominación presidencial de los partidos Demócrata y Republicano.
Los inmigrantes que se beneficiarían con el plan del gobierno son principalmente los padres de ciudadanos estadounidenses y de residentes con permanencia legal.
Obama ha alegado que debió actuar por cuenta propia luego de que el Congreso no aprobó una amplia reforma de inmigración. Un programa previo que no ha sido impugnado, llamado "Deferred Action for Childhood Arrivals", ya protege a los inmigrantes que fueron llevados al país sin autorización durante su niñez. Más de 720.000 jóvenes inmigrantes han recibido permiso bajo ese programa para vivir y trabajar en Estados Unidos.