Increíble, pero real. Una beba que fue concebida en el Día de los Enamorados nació con una marca con forma de corazón en el rostro.
Cuando la joven pareja integrada por Jade Sparham (20) y Liam Scaife (21), celebró la llegada de su primera hija, en noviembre pasado, el amor invadió sus corazones: la pequeña había sido concebida el 14 de febrero de 2015.
Pero a los pocos meses de vida, los padres de Poppy-Rae se empezaron a preocupar. Cada vez que la beba lloraba o se reía, una gran parte de su rostro se enrojecía demasiado.
Una marca muy particular
Cuando decidieron llevarla con el médico de cabecera de la familia, para ver qué significaba esto que veían, se enteraron de que se trataba de una mancha de nacimiento.
A pesar de que Liam y Jade, oriundos de Inglaterra, se aliviaron de que esto no fuese peligroso, ambos se preocuparon por las burlas que la niña podría sufrir en el futuro.
La madre de Poppy-Rae contó al periódico The Sun que al principio les costó adaptarse a la idea de que su pequeña tuviese una marca tan particular: “Pensé que esto podría llegar a perjudicarla en sus relaciones futuras”, se sinceró.
Los padres de Poppy-Rae posaron junto a la pequeña. Foto: John Aron Photography/HotSpot Media/Daily Mail
Baby Valentine’s
“Por suerte nos dimos cuenta de que esta mancha de nacimiento que tiene nuestra hija es lo que la hace única y, en vez de perjudicarla, la embellece aún más”, reflexionó Jade. Además, la madre de la beba aseguró que todo este asunto los ayudó a mantenerse aún más unidos como familia.
Por su parte, Poppy-Rae se prepara para recibir su primer San Valentín rodeada de amor.